domingo, 13 de noviembre de 2011

Por ser una niña me tengo que educar





En algunos países nacer fémina supone una carga discriminatoria de por vida





* Aproximadamente 140 millones de mujeres sufren toda su vida las consecuencias de la mutilación sexual y dos millones de niñas mueren al año debido a esta práctica. 
* En los próximos 10 años, se estima que 10 millones de niñas serán obligadas a casarse antes de los 12 años.
* La mitad de las víctimas de la violencia sexual a nivel mundial son niñas menores de 15 años.
* 62 millones de niñas aún no van a la escuela.
* Más de 900 millones de niñas y mujeres sobreviven con menos de un dólar al día; las mujeres representan al 70% de las personas pobres en el mundo.
* 450 millones de mujeres sufren problemas de salud (consecuencia de los problemas que tuvieron en su época de crecimiento debido a la malnutrición en su infancia).
* 68.000 adolescentes mueren al año debido a la práctica de abortos.
* Dos de cada tres adolescentes africanos con VIH/Sida son niñas. Se estima que 7 millones de niñas y mujeres jóvenes son contagiadas con el VIH, frente a 4 millones de niños o adolescentes.

Todos podemos discernir aún sin vivirlo, cómo puede ser la vida de una niña en los países industrializados o la de una niña del tercer mundo. Una de las armas y vías de escape que tienen estas niñas es la educación.
Evitar esta situación es tarea de todos los gobiernos del mundo, de hecho, todos los informes que se han elaborado por distintos organismos como La Organización de las Naciones Unidas, la Organización Mundial de la Salud o cientos de ONG'S, coinciden en la necesidad de proporcionar educación a la infancia, mejorar las condiciones sanitarias, etc. En resumidas cuentas, para cambiar la situación de pobreza extrema, es necesario aumentar los recursos destinados a la educación.

Hay que devolver la infancia a los niños, eso es tarea de todos, nuestro granito de arena servirá para formar la montaña que frene toda esta catastrófica situación.

2 comentarios:

  1. Lamentable, es una realidad vergonzosa. Sin duda tanta culpa tienen los paises en los que se llevan a cabo semenjantes atrocidades, como los paises que desde la barrera lo toleran, paises que se enorgullecen de tener sociedades democráticas y de derecho. Mi enhorabuena y reconocimiento a toda la gente que lucha por evitar estas injusticias, y para los que lo conocen, permiten y justifican cien años de soledad con su misma moneda

    ResponderEliminar
  2. no es sólo una salida, sino que es una obligación de todos los gobiernos proporcionar esa educación que les puede ayudar hacia el conocimiento, hacia su libertad. no podemos dejar que un derecho fundamental lapide la vida de tantas niñas.

    ResponderEliminar